Orden en la cocina, pero con estilo

Este es el segundo marco que os comentamos, y en esta ocasión pensamos que no iría mal uno de ellos para la cocina, que a veces la dejamos un poco de lado y colgamos los trapos y delantales en cualquier gancho.
Pues hemos querido ponerle un poco de estilo con estos colgadores con números.
Forramos el fondo con un papel con motivos culinarios y hemos rematado el marco con tachas plateadas.
Seguro que no pasa desapercibido.

¡FELIZ FIN DE SEMANA!

Llaves, llaves, llaves!!!

Siguiendo con nuestra corta etapa de manualidades, hoy os dejamos con esta última que hemos hecho.
Como lo guardamos todo (a veces es bueno hacer limpieza de trastos), encontramos en el trastero tres marcos que en su día albergaban unos óleos, pero como no nos gustaban como quedaban, decidimos dejar los óleos simplemente con la bastida. Y muchíiisimo mejor. Además las modas cambian.
Pues bien, como no tienen cristales ni traseras, hemos dado bastantes vueltas a la cabeza a ver que hacíamos con ellos.
A todos nos pasa, o a casi todos, que una vez llegas a casa y has abierto la puerta, te quedas con las llaves en las manos y muchas veces no sabes donde dejarlas, y acaban en el bolso, en la cocina, puestas en el cerrojo, o con suerte las dejas en la cajita que tienes en un rincón del recibidor.
Pues bien, nuestro post de hoy es una idea para organizarlas y a la vez decorativo.
Pintamos el marco en blanco (previa imprimación) y la moldurita interna, en dorado. Cortamos una madera del tamaño del hueco para hacerle la trasera. También la pintamos en blanco, y todo barnizado.
En las esquinas hemos aplicado un decoupage con unas servilletas.
Rescatamos de nuestro baúl unas llaves antiguas que hemos puesto en el centro.
Y para colgar las llaves, en la parte inferior hemos clavado un listón pequeño con unos tornillos dorados en ele, y ahí es donde irán colgadas las llaves.
Ahora estamos con el segundo marco. Ya veréis en qué lo hemos convertido.
Como siempre, aquí tenéis las fotos del antes y después.

antes

después

¡FELIZ FIN DE SEMANA!

Perchas tuneadas y personalizadas

Estos días estamos haciendo "trabajos manuales" o como antaño se decía en el colegio, "clase de pretecnología".
Hemos decidido tunear perchas y hacerlas al gusto del consumidor. Perchas personalizadas.
Después de darles imprimación, pintarlas en blanco y barnizadas, les hemos hecho (en el caso de las grises) un decoupage con unas servilletas de papel. Las hemos rematado con una pasamanería de terciopelo en un color grisáceo a tono con el papel.
El el caso de la otra percha, la hemos hecho más "femenina", con unas puntillas blancas, unos corazones azules y rematada el la parte metálica de la percha, con una bola de porcelana pintada.
Nos parecen un detalle decorativo y diferente para nuestros armarios.

Jaula antigua. Antes y después

Este es un capricho que nos encandiló.
Conseguimos esta antigua jaula de pájaros que ya cuando la tuvimos en las manos, nos encantó.
Después de darle muchas vueltas a ver qué hacíamos con ella, se nos ocurrió en transformarla en una lámpara.
Aunque parezca extraño, también estaba atacada por la carcoma. ¡Pobres pájaros los que vivían en ella!
Lo sorprendente es que todavía conservaba el bebedero de cristal, el comedero de porcelana para el alpiste y la bandeja inferior de metal. Su columpio y el otro comedero de madera con sus orificios.
En definitiva, una monada.
Después de hacerle el tratamiento contra la carcoma, pintamos toda la reja en dorado.
El acabado de la madera lo hicimos dándole unos pequeños toques en blanco. Estirando bien la pintura con una brocha pequeña de cerdas duras. Y una capa de barniz satinado.
En cuanto a la parte eléctrica, aquí es donde tuvimos más problemas. Como siempre lo guardamos todo por el que "seguro que nos servirá para algo", rescatamos una antigua pantalla pequeña. Pero, ¿cómo la colgamos? Pues con unos alambres muy finos que tenemos para colgar las lágrimas de lámparas, la pusimos en una esquina. El cable es uno que utilizamos siempre en lámparas antiguas, de tela dorada. La bombilla tenía que ser una muy pequeña, por eso le hemos puesto una de las de neveras.
Había que adornarla un poco, no en exceso. En dos esquinas colgamos dos lágrimas de cristal. En el comedero, unas flores secas, y para rematar rescatamos de nuestro baúl de los recuerdos, dos pájaros de tela, uno en el columpio y el otro en el comedero. Pintamos de azul, la mitad del bebedero para imitar el agua.
Y así nos ha quedado nuestro tesoro.

antes

antes

antes

montando el enchufe

después

lágrimas

columpio

bebedero

comedero porcelana

flores y pájaro en comedero

detalle puerta

cajetín comedero

¿qué os parece?

Sillas años 60 restauradas. Antes y después

Esta vez hemos estado trabajando con cuatro sillas de la época de los 60.
Nos las trajeron para que les hiciéramos un cambio de look, y para restaurarlas.
Una vez les hicimos el tratamiento anticarcoma, tapamos todos los agujeros.
La persona que nos las trajo las quería en color blanco roto. La pintura que hemos utilizado en ellas ha sido el blanco carrara. Las hemos desgastado un poco en las aristas y otras zonas para que saliera el color de la maderas.
Para el tapizado, tuvimos varios en las manos y finalmente la clienta se decidió por esta preciosa tapicería, que le da mucha elegancia a la silla.
Hemos rematado el tapizado con tachas. También cambiamos el forro del culo de los asientos y elegimos una tela metalizada en negro.
Y como siempre, aquí os dejamos las fotos del antes y después.

Antes

Carcoma!!!

(perdón, está del revés)

¡¡FELIZ SEMANA A TODOS!!

Restobar Butikfarra de Barcelona

Feliz dia de Reyes a todos!
Estamos muy contentas porque uno de nuestros clientes ha abierto un restaurante. Dos de nuestros espejos están decorando las paredes de este fantástico restobar.
Para los que residáis en Barcelona, os lo recomendamos. Se llama Butikfarra  y está en la calle París 209. Un nuevo concepto de restaurante a precios muy asequibles.
Aquí os dejamos la foto que nos han pasado los dueños donde veréis nuestros dos espejos. El grande estilo valenciano y al lado el de color marfil.

Caja de reloj antigua

Esta es nuestra pequeña joya.
Conseguimos esta preciosa caja de reloj antigua y pensando que íbamos a hacer con ella, se nos ocurrió la idea de convertirla en PERFUMERO!!!
Tenemos una querida clienta que cuando la vio en bruto, le encantó, y más aún cuando le comentamos en qué la íbamos a convertir. Le entusiasmó tanto la idea, que se la agenció. Y como todavía no habíamos hecho nada con ella, le dijimos que se la personalizábamos como ella quisiera. Así que, como le gustaría colocarla en el baño, nos dijo que la quería acabada en blanco. Le propusimos la idea de añadirle un estante y una puntilla.
Como curiosidad, en el interior hay una pequeña placa de piel donde está grabado el nombre de la joyería donde se hizo. Y como ya sabéis, nos gusta conservar toda señal del origen de la pieza.
Y aquí tenéis el antes y el después.
Estamos deseando poder dársela ya!!!!

Antes

Antes

Ya decapada

Placa de piel con el nombre de la joyería

En proceso de restauración

En proceso de restauración

Terminada

Interior con estante y puntilla


¿Verdad que es una cucada?